Dice Victor Kuppers que pasamos la vida corriendo como pollo sin cabeza, que vamos tan acelerados como si estuviésemos en una carrera contra no sabemos quién y que estamos muy tarados…. Para evitar esto nos propone que nos tomemos la vida con calma, que seamos capaces de disfrutar de las pequeñas cosas que tiene la vida y de esa filosofía está surgiendo una nueva forma de viajar; Slowdriving se llama y si no sabes de qué va, sigue leyendo.
Todo comienza cuando alguien se da cuenta que viajar es sinónimo de rapidez, pero no de la rapidez que nos brindan los aviones, trenes o coches sino de la ansiedad provocada por querer ver más cosas de las que días tenemos. Por ello surge este movimiento que pretende disfrutar de ver y hacer las cosas de forma lenta, viviendo esos pequeños detalles que marcan la diferencia.
¿Qué te aporta viajar de esta forma? Que vas a ser capaz de descubrir esos rincones que nadie tiene tiempo para descubrir, que vas a conocer personas encantadoras que no están pensando en venderte nada porque para ellos eres una novedad no una forma de recaudar dinero y en definitiva vas a ver que, a veces, la vida a cámara lenta tiene más encanto que a toda velocidad.
Hoy ha comenzado FITUR y si os acercáis podréis conocer de primera mano esta nueva forma de viajar ya que hay muchísimos destinos que os proponen nuevas rutas en las que de lo que se trata es de descubras la esencia de los destinos y no de acumular horas de vuelo como si de un avión se tratase.
