En nuestra constante búsqueda de desafíos personales hemos topado con una nueva actividad que desconocíamos y que nos han invitado a probar en unas semanas. Quizá vosotros ya la hayáis disfrutado pero nosotros no vemos el momento de ponernos el arnés y comenzar a trepar. Antes de nada hemos seguido el principal consejo que debe seguir cualquiera que se inicie en una actividad: recabar la mayor cantidad de información posible. Como hemos pasado muchas horas preguntándole a Google os vamos a ahorrar el esfuerzo.
En general una vía ferrata es un itinerario que transcurre por paredes de roca y que está equipado para facilitar la progresión mediante peldaños, clavijas, rampas, pasamanos, grapas, cable y en general todo tipo de elementos que garantizan la seguridad de los aventureros a lo largo de la ruta.Estos “caminos de hierro” surgieron en las Dolomitas (Alpes italianos) y que se inventaron para equipar y garantizar el paso de los soldados alpinos por los pasos más difíciles de superar se han empezado a hacer populares entre los amantes de la montaña ya que se encuentra a medio camino entre el senderismo y la escalada.
Antes de lanzarte a comprar todo el material te recomendamos que contactes con alguna empresa que desarrolle cursos de iniciación ya que en algunos casos puedes encontrarte con situaciones peligrosas a muchos metros de altura donde un fallo puede ser fatal. Otra opción es que busques algún club de montaña que haga estas actividades, de este modo aprendes y conocerás personas con tus mismas pasiones.
Si te ha picado el gusanillo y quieres ir preparando tu próxima salida te dejamos un pequeño listado con algunas vías espectaculares.
La Norte de Cid (Petrer, Alicante)
Hoces del Salado (Santamera, Guadalajara)
El Ranero (Huerta de Rey, Burgos)
Tajo de Ronda (Ronda, Málaga)
La Teresina (Montserrat, Barcelona)
La faja de las flores (Torla, Huesca)