Hace unos cuantos días acudimos, como muchos sabréis, al Arenal Sound 2015, en Burriana. Montamos un stand muy apañado, todo hecho a mano, que solo nos costó unas 6 tardes de agradable calor infernal (típico a finales de julio en la Comunidad Valenciana).
Por fin llegó el gran día, todo estaba listo para dar a conocer Undërwood a los miles de sounders que en pocas horas abarrotarían el recinto de conciertos. Como suele ser habitual en este tipo de eventos los primeros días mucha gente se acerca más a curiosear que a comprar, comprensible si tienes en cuenta que aún queda una semana por delante y no puedes ir gastándote todo tu presupuesto festivalero prácticamente antes de que empiece el propio festival. Aún teniendo todo esto presente, los dos primeros días superamos nuestras propias expectativas, nuestra zona chill out estaba llena de chicos y chicas disfrutando de las cachimbas que pusimos para todo aquel que quería descansar un poco.
Los dos siguientes días, jueves y viernes, eran los más fuertes, donde tocaban los artistas que mas expectación levantaban entre el público. Pero entonces apareció un protagonista inesperado, el temporal. Con ella se suspendieron las actuaciones de Rudimental (aunque algo le dio tiempo a tocar) y Jhon Newman (entre otros). A pesar de la lluvia torrencial y el viento huracanado, no sufrimos más desperfectos de los que cabía esperar, algún elemento del stand mojado, las macetas volando, unos cuantos cojines que algún sounder tuvo a bien llevarse a la tienda para disfrutar de mayor confort (si nos estás leyendo, esperamos que los hayas disfrutado), unos cuantos jóvenes que albergamos en nuestro stand mientras pasaba el temporal de ambos días y poco más. Lo peor de todo: no poder disfrutar de la música, lo demás genial.
Llegados a este punto sabíamos que ya no había nada ni nadie que pudiesen parar al Arenal Sound y a los miles de jóvenes que solo querían disfrutar a la buena música y la experiencia de uno de los festivales más importantes de Europa. Y así fue, los dos días restantes estuvieron llenos de buen rollo, risas, música y un stand repleto de sounders que parecieron disfrutar de nuestro chillout, nuestras camis y nuestras sudareras.
Podemos resumir nuestra experiencia en dos palabras agradecimiento y éxito. Os queremos dar las gracias a todos y todas aquellas que os acercasteis y nos ayudasteis a colgar el cartel de SOLD OUT. Gracias a vosotros sounders y al Arenal Sound por permitirnos pasar una semana inolvidable. ¡Nos vemos el año que viene!